viernes, 20 de junio de 2014

Del tesoro y del corazón

Es una experiencia universal, que a todos nos ocurre, que donde está nuestro tesoro allí está nuestro corazón. Sin embargo, lo que ya no es tan universal es darse cuenta de ello. Es más, con frecuencia miramos hacia otro lado para obviar esta realidad de nuestra vida.

Pensamos y actuamos sobre aquello que realmente nos importa, por eso evaluar dónde tenemos el propio tesoro nos abrirá las puertas para conocer dónde tenemos puesto el corazón.

La ecuación es sencilla: tesoro y corazón no son la misma cosa, pero ocupan el mismo espacio interior. Esto nos facilita enormemente la labor de examen de conciencia.

¿Habitualmente en quién piensas, en ti o en los demás?
De modo ordinario ¿en qué piensas, en tus cosas, en las de los demás?
Tu tiempo, ¿a qué y a quién lo dedicas?
Tus bienes, ¿a quiénes benefician?

¿Quieres que sigamos?
Sé generoso.

Vero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario